¿BUSCAS UN ENTRENAMIENTO DIFERENTE? ¡LOS EJERCICIOS ISOMÉTRICOS TE ENCANTARÁN!
Estamos acostumbrados a realizar entrenamientos de alto impacto o que incluyan rutinas que pongan a trabajar todos los músculos, pero existe un entrenamiento en donde haces todo lo contrario: entrenas mientras dejas en tensión los músculos de forma estática, empujando o tirando de algo que no pueda moverse, como una pared, una toalla, tu propio peso, o un material como una cuerda atada a una estructura fija. Estos son, los ejercicios isométricos.
Cuando practicas un ejercicio isométrico, los músculos se someten a una tensión sin forzar las articulaciones, por ello tienen muchas diferencias con los ejercicios de fuerza, en donde debes contraer tus músculos con ciertos rangos; sin embargo, en los isométricos, los contraes en una misma posición durante un tiempo específico. ¡Diferentes, pero efectivos!
Ventajas.
- Aumentas de forma rápida tu fuerza muscular y activa toda tu musculatura en cada ejecución. De esta forma, tendrás un cuerpo definido en la zona del torso, hombros, la espalda y brazos, entre otras.
- Aumentas la resistencia y eficiencia del cuerpo.
- Puedes hacerlo en corto tiempo, ya que una sesión de ejercicios isométricos dura pocos minutos.
- El riesgo a lesionarte es bajo o casi nulo, por eso es ideal para quienes tienen articulaciones débiles porque no produce ningún impacto.
- No requieres máquinas especiales, por lo que puedes practicarlos aunque salgas de viaje.
Desventajas.
- Si tienes problemas cardiacos o de respiración, deberías evitarlos.
- No puedes concentrarte solamente en este tipo de ejercicios, debes combinarlos con ejercicios dinámicos y de estiramiento.
- Si estás en rehabilitación muscular, para lo que son muy buenos, haz cardio suave para mayor efectividad.
Te recomendamos calentar antes del ejercicio isométrico; por tratarse de una tensión constante, podrían aparecer roturas y elevar la presión sanguínea.