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8 errores que suelen cometerse a la hora de entrenar

8 errores que suelen cometerse a la hora de entrenar

La mejor forma de entrenar durante este año ha sido en casa y muchos han tenido que acudir a tutoriales, aplicaciones o a su propio instinto y conocimiento para organizar una rutina de ejercicios funcional sin la ayuda de un experto. Esto ha ocasionado que durante el entrenamiento cometamos algunos errores precisamente por desconocimiento y es posible que esta sea la razón por la que los resultados tardan en llegar. ¿Te has preguntado si estás llevando a cabo un entrenamiento coherente a tus objetivos, tiempo y necesidades físicas? Evaluemos juntos estos errores y corrijamos a partir de hoy lo que no está funcionando.

 

  1. Saltarse el calentamiento. Arrancar como locos a hacer ejercicios es un error que te puede acarrear lesiones delicadas. Al no calentar previamente, se reduce el nivel de rendimiento. Debes darle estructura al entrenamiento, de tal forma que el calentamiento de los grupos muscuclares dure unos 10 a 15 minutos en actividad suave. Siente cómo sube la temperatura y la frecuencia cardiaca lentamente y en ese momento, comienza tu ejercicio.

 

  1. Demasiado ejercicio. Del afán, no queda sino el cansancio. Lleva una actividad física y un ejercicio moderado, en el que realices esfuerzo con peso corporal o entrenamientos de fuerza y cardio, pero de forma estructurada para que tengan un real efecto en tu cuerpo.  Selecciona el momento del día que mejor te quede para el ejercicio, calienta, estira, entrena y descansa. Hacer ejercicio de más, no logrará efectos positivos adicionales. 

 

  1. El mismo ritmo. Nuestro cuerpo necesita variedad en cuanto a la intensidad, ritmo y tipo de ejercicios para obtener lo máximo de la rutina. Cuando se juega con el ritmo, se ejercita la respiración, la mente y el cuerpo. Si tienes la posibilidad, varía en los accesorios; usa unas bandas elásticas o unos discos deslizantes, en otra ocasión, un lazo para saltar y en otra, un banco step. De hecho, te aseguramos que no has notado que en tu misma casa tienes elementos que te pueden servir, como una silla para las sentadillas, una mochila con peso para hacer remo, entre otros. En la variedad, estará el placer.

 

  1. Estar pendiente de la tele o del celular. Concentrarse en el ejercicio es clave para que la efectividad sea mayor. Pon música si lo deseas, pero estar mirando otros dispositivos, las noticias de la tele o tomándote fotos, hará que bajes la intensidad del ejercicio o que hagas pausas donde no las hay.

 

  1. No descansar. Sin importar la intensidad del entrenamiento, necesitamos un descanso. Este error sucede con frecuencia porque al realizar ejercicio por nuestra cuenta, nos falta asesoría acerca de la importancia del descanso, que es el encargado de ayudar a crecer y recomponer los músculos. Tras el descanso, los músculos se rinden mucho más porque han reposado y se encuentran frescos frente a un nuevo entrenamiento. No detenerse durante la semana, te cobra factura tarde que temprano, así que, si estás fallando en esto, aún puedes enmendarlo.

 

Pero no confundas descansar un día, con el tiempo de descanso entre repeticiones y series. Un error común es prolongar o reducir el tiempo dentro de los entrenamientos. Si los extiendes, se desvanece lo que entrenaste y si los acortas, no vas a producir las adaptaciones necesarias.

 

Sin actividad habitual: día por medio de descanso.

Con buen estado: dos días de ejercicio y uno de descanso.

Con un hábito estable: tres o cuatro días de ejercicio y uno de descanso.

 

  1. Saltarse el estiramiento. De igual manera, pensar que calentar y estirar es lo mismo, es un error. El estiramiento es imprescindible, porque es el momento de hacer ejercicios de movilidad que ayudan a los patrones posturales y a reducir dolores de espalda, entre otras zonas que se afectan debido a malas posiciones durante el día. Antes de culminar el ejercicio, también debes estirar.

 

  1. Dejar la hidratación solo para el final. Repite: antes, durante y después. Con agua es más que suficiente para hidratarse, no requieres bebidas isotónicas a no ser que el ejercicio sea aeróbico y mayor a una hora. Toma pequeños sorbos durante el entrenamiento, ya que cuando sudas, estás deshidratándote y es importante mantenerse bien y no sufrir un mareo o algo más serio en pleno ejercicio.

 

  1. Somos conscientes de nuestras capacidades, por lo tanto un grave error es pretender realizar un entrenamiento que sobrepase nuestras posibilidades físicas. Medir fuerzas, conocer el límite y controlar el trabajo, permitirán ejercitarse sin riesgos y de acuerdo a nuestra capacidad motora y funcional.

 

¿Consideras que quizás estés cometiendo un error que no hemos mencionado en la anterior lista? Comparte con nosotros y cuéntanos cómo lograste solucionarlo.

 

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